Galería: El Príncipe Andrés en imágenes
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El Príncipe Andrés de Inglaterra ve peligrar su estancia en la mansión en la que vive con su exmujer Sarah Ferguson. Esto se debe a que el Rey Carlos III, su hermano, va a rebajar el apoyo económico que le hace llegar a partir de abril de 2023. Si esto es así, el tercer hijo de la Reina Isabel II no podrá pagar el mantenimiento de la mansión Royal Lodge, valorada en casi 34 millones de euros. Por lo que el Príncipe y su familia se verán obligados a abandonar la casa, que es propiedad de la Familia Real.
El Príncipe AndrésEsta situación se suma a la pérdida de ingresos que ha sufrido después de renunciar a sus deberes reales por estar relacionado al escándalo del caso Epstein, por el que pagó millones de euros por un acuerdo para no ser juzgado y por lo que dejó de recibir dinero público. "Se trata de que el Rey Carlos le ha dicho al Príncipe Andrés que puede usar su propio dinero para pagar sus cosas", ha contado una fuente cercana al periódico británico Daily Mail.
Sin embargo, amigos cercanos al Duque de York han sugerido que este podría estar buscando oportunidades comerciales en el extranjero como lo han hecho los Duques de Sussex en Estados Unidos. Pero otros señalan que el Duque habría recibido una considerable herencia de la Reina Isabel y del Duque de Edimburgo que le permitiría buscar otro lugar para vivir.
El Príncipe Andrés junto a las Princesas Beatriz y Eugenia de York y Sarah Ferguson en Buckingham PalaceParece ser que la noticia de que su asignación económica vaya a verse reducida ya se le podría haber comunicado durante la Navidad de 2022 cuando un alto cargo de la Familia Real parece que le dijo en broma al Príncipe Andrés: "Echaremos a Andrés de la casa". Y esto es algo que tiene muy preocupados al Duque de York y a su exmujer. "No están siendo expulsados explícitamente, pero se espera que no pueda pagar el mantenimiento", han dicho fuentes cercanas al Príncipe al diario The Sun.
El Príncipe Andrés y Sarah Ferguson no viven solos en Royal Lodge
Con el fallecimiento de la Reina Isabel II, el Príncipe Andrés y Sarah Ferguson adoptaron a dos de las mascotas de la Reina, Muick y Sandy, por lo que los cuatro viven en la mansión de Royal Lodge. Muick fue comprado a un criadero y le puso el nombre del lago favorito de la Reina en Balmoral. Sin embargo, Sandy fue un regalo del Príncipe Andrés y sus hijas por el 95 cumpleaños de la Reina.
