Galería: La Princesa Leonor en imágenes
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La formación militar no es fácil, pero la Princesa Leonor ha demostrado que puede, que está decidida a hacer lo que se espera de ella y además a disfrutar con el proceso. La Princesa de Asturias no tiene elección, pero sabe que si se toma su destino no como una losa, sino como una oportunidad, no solo triunfará, sino que además será feliz en su camino como heredera, y algún día, como Reina de España.
La Princesa Leonor besando la Bandera de España en su Jura de BanderaSus primeras semanas en la Academia General Militar no fueron fáciles, pero logró ir pasando todas las pruebas y el 7 de octubre de 2023, juró bandera. Por el camino fue forjando amistades con las que hace planes y con las que se divierte en sus momentos de descanso, que también los tienen.
Un refresco en una terraza y cena para llevar
Como publica ¡Hola!, uno de ellos fue en la tarde-noche del 1 de diciembre de 2023, cuando salió por Zaragoza con su grupo. Se instalaron en la terraza del Murray's Tavern pese al frío. Eso sí, la Princesa de Asturias iba bien protegida con un abrigo negro con forro de franela de cuadros, jersey de lana, bufanda blanca y pantalones de piel.
La Princesa Leonor en Zaragoza en la portada de ¡Hola!La Princesa Leonor tomó un refresco porque no bebe alcohol, de hecho parece que la primera vez que lo probó fue en el almuerzo celebrado en el Palacio Real tras su Jura de la Constitución, el mismo día de su 18 cumpleaños. Por su cara, parece que no le hizo mucha gracia el cava con el que se realizó un brindis en su honor.
El grupo de amigas pasó un par de horas en el citado establecimiento, pasando después por un McDonald's para comprar cena que degustar en la Academia General Militar. Cierto es que la Princesa Leonor intenta llevar una alimentación muy saludable, pero le gustan las hamburguesas y de vez en cuando se da un capricho.
La Princesa Leonor, muy sonriente en su presentación a la Virgen del Pilar como dama cadeteEran las 23:00 horas del citado día cuando regreso a la Academia de Zaragoza. Se le vio hablando por el teléfono móvil, tranquila, cómoda y quizás pensando que nadie le había reconocido. Eso sí, mal no le viene que se hayan publicado estas imágenes porque desmentirían que esa noche estuviera en el reservado de una discoteca de Madrid bailando hasta las 05:30 horas. No es que haya nada malo en que una joven de 18 años salga de fiesta, ni mucho menos, pero si estaba en Zaragoza, no podía estar en la capital de España.
