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Todo parece indicar que George y Amal Clooney se convirtieron en unos de los invitados estrella de la boda de los Duques de Sussex, el Príncipe Harry y Meghan Markle, sin conocerles, por lo que se conocieron en la boda real. El actor y la abogada se encontraban entre los 600 invitados que fueron a la boda celebrada en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor en mayo de 2018, una ceremonia única en la que también estuvieron presentes otros rostros conocidos.
Los Clooney, a pesar de no haber tenido trato previo con la pareja según el medio AirMail, tuvieron un banco privilegiado junto a Lady Carolyn Warren, que está casada con John Warren, el asesor del linaje de la Reina Isabel. Además, se ha conocido que Carolyn Bartholomew, la excompañera de piso de la Princesa Diana, mientras esperaba que comenzara la ceremonia, habló con ellos y les preguntó de qué conocían a los novios, y ellos, con tono alegr e, dijeron que en realidad no se conocían.
Carolyn Bartholomew no solo fue compañera e piso de Lady Di, sino que además es madrina del Príncipe Harry, y por eso consiguió uno de los mejores asientos frente al Príncipe Guillermo y el Príncipe Carlos, por eso no se entiende que el famoso actor y su mujer estuvieran en un lugar tan privilegiado.
Otros de los invitados famosos que acudieron a la boda real fueron Oprah Winfrey, James Corden y David y Victoria Beckham, que se cree que tampoco tenían con los novios un vínculo muy estrecho. Oprah Winfrey, Serena Williams y su marido Alexis Ohanian estaban sentados cerca de los Clooney mientras que los Beckham, James Corden y su mujer estaban más lejos, aunque cabe matizar que ellos no eran amigos cercanos.
¿Sí o no?
Pero aunque se haya dicho que no se conocían y que invitar a rostros conocidos tan solo fue una estrategia para aportar clase y prestigio a la boda, Finding Freedom, la biografía del Duque y la Duquesa de Sussex, afirma que los Clooney hospedaron a la pareja en al menos dos ocasiones en su casa británica en Sonning, Oxfordshire.

