-
Raúl Rodríguez y Silvia Taulés nos cuentan su papel en 'La familia de la tele'
-
Kiko Matamoros y Lydia Lozano: "Nuestro público es de todas las edades y RTVE tiene un público muy pegado a las novelas, al que tenemos que captar"
-
Carlota Corredera y Javier de Hoyos: "La tele tiene que representar al público también y aquí están todos los perfiles posibles&quo;
-
Así se tomó Felipe VI que la Infanta Sofía no quisiera recibir formación militar
-
Belén Esteban: "Estoy emocionada, muy contenta y muy feliz por llegar a RTVE"
-
Manu Baqueiro: "Tuve como referente a Bruce Willis en 'Luz de Luna' para mi trabajo en la serie 'Perdiendo el juicio'"
-
Magdalena de Suecia responde a las críticas y explica por qué le han permitido lanzar su propio negocio
Katie Price y su marido Kieran Hayler besándose / Foto: TwitterKatie Price fue sometida a una cesárea de urgencia mientras estaba de vacaciones. Después de que la modelo diera a luz a su hijo Jett Riviera en un parto que lo calificó de "pesadilla", ha vuelto a reaparecer. Es la primera vez que sale a la luz una imagen de ella tras el susto, ya que Price ha estado escondida en el extranjero desde que dio a luz a su cuarto hijo.
Para su aparición su marido Kieran Hayler ha publicado una imagen en su cuenta personal de Twitter. En la fotografía ambos se están dando un beso apasionado, hecho que ayuda a corroborar que ya está bastante recuperada. Junto a la instantánea publicó: " Han sido tres semanas muy duras, pero estamos más cerca y enamorado que nunca. Amo a mi esposa @MissKatiePrice".
Más tarde, Hayler publicó otra imagen de sus manos unidas junto a sus anillos de compromiso, donde escribió: "En la salud y en la enfermedad. Podemos superar cualquier cosa". Ahora la pareja, que llevan casados siete meses, se alojan en una casa situada cerca del hospital en el extranjero, donde mantienen a su bebé en una incubadora.
Un parto peligroso
El pequeño nació en un parto peligroso después de que a Price le diagnosticaran una infección que ponía en peligro la vida del bebé. Dicha circunstancia había provocado la ruptura del saco amniótico (donde se desarrolla el feto) y, en consecuencia, una peligrosa reducción del ritmo cardíaco del futuro bebé. Por suerte, parece que tras el susto todo se desarrolla correctamente.
