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Es la imagen más tierna que puede ofrecer Nicolas Vállejo Nájera en estos duros momentos. Tras comenzar los trámites de divorcio de Paulina Rubio, Colate se ha dejado ver junto a su hijo Nicolás disfrutando de una tarde de juegos en un parque de Miami aunque su rostro reflejaba en cierto modo tristeza y preocupación.
El pequeño Nicolás, que probablemente todavía es muy pequeño para ser consciente del delicado momento por el que atraviesas sus padres, -ya han comenzado los rumores que apuntan a la guerra que se abrirá por el reparto de propiedades-, se ha divertido mucho montando en los columpios y jugando junto a su padre y otros niños que había en el parque.
Precisamente la única razón de Colate para permanecer en Miami tras su ruptura con la cantante es su hijo Nicolás. El empresario quiere permanecer a su lado y poder disfrutar siempre que pueda de los juegos y las risas de su pequeño tras su desencuentro sentimental.
Paulina Rubio y Colate, una relación sin solución
Paulina Rubio, por su parte, se encuentra estos días en México cumpliendo con una serie de compromisos profesionales. En unos días volverá a Miami aunque no se reencontrará con su exmarido puesto que, según ha apuntado Colate, las cosas entre ellos no han acabado nada bien.
Así comienza a escribirse el capítulo final de la relación entre Paulina Rubio y Colate, que sellaron su amor con una romántica boda celebrada el 30 de abril de 2007 en el paradisíaco lugar de Xcaret, parque temático ecológico situado en la Riviera Maya. Fruto de ese amor nació el 16 de noviembre de 2010 el pequeño Nicolás, el único vínculo que ahora une a la expareja.

