Carla Barber revela la razón por la que ya no tiene a su perro Togo

Carla Barber ha contestado una ronda de preguntas de sus seguidores y una de las cosas que ha revelado es la razón por la que su perro Togo ya no vive con ella. Cabe recordar que este perro llegó a su vida en un momento delicado, cuando en octubre de 2020 fue atracada en el portal de su casa y quedó inconsciente, por lo que decidió comprar un cachorro de Akita Americano para después adiestrarlo y que la protegiera en su hogar.

Carla Barber con su perro Togo/ Foto: Instagram

Una de las primeras cosas que ha revelado es que no lo adoptó, sino que lo compró, pero con el tiempo ha dejado de estar con ella por varias razones, contando dónde está ahora. "Por suerte mi amigo y su familia lo acogieron al nacer Bastian (tuvo un problema respiratorio, le ingresaron en UCI neonatal y nos aconsejaron no sacarlo de casa en un mes cuando nos dieron el alta) Togo sigue en Ávila desde entonces ", decía la cirujana.

Así que su nueva maternidad habría sido una de las razones principales por las que ya no tiene mascota. Asimismo, ha contado que cuando el perrito creció le llevó a un adiestrador para que después se convirtiera en su protector, sin embargo, le avisaron de que su perro cambiaría su carácter, así que se negó y en realidad ha sido para ella un perro de compañía.

Carla Barber con Togo/ Foto: Instagram

Pese a todo, ha asegurado que el perrito está bien: "Togo está feliz. Además de estar con una familia que le adora y está siempre en casa (yo viajo mucho por trabajo y tenía que dejar al perro en alguna guardería en el centro de Madrid o con MAYET que no podía con él y tuvo un par de caídas en alguna ocasión. El tamaño de Togo no me permitía llevarle conmigo en el avión y al ser PPP (perro potencialmente peligroso), tampoco podía llevarle si quiera en el AVE)".

Va a ver a Togo de vez en cuando

Parecer ser que se había convertido en un inconveniente para su día a día, por lo que tenía que dejar a Togo en más de una ocasión en un hotel canino. "Le sacan a diario por el campo, al aire libre y con terreno para correr lo que quiera, cosa que en Madrid era inviable. La verdad que cuando me lo compré, nunca pensé en lo complicado que sería adaptar mi vida a tener un perro de gran tamaño. Además, cuando le lleve a adiestrar cuando hizo seis meses para que fuera un perro protector, me eché para atrás porque me dijeron que dejaría de ser el perro que yo conocía", seguía diciendo. Mientras, continúa teniendo contacto con el animal, porque ha dicho: "Este sábado voy a Ávila a verle... no imagináis las ganas que tengo" aclara.